InsoMnio

Pasados estos últimos días parece que los horarios se han invertido para mi de manera inusitada, abrupta, salvaje.

A partir de las diez de la noche se establece una atmósfera tenebrosa en la que una energía inasible me roba el sueño y la guarda en su último bolsillo. Me siento vulnerable, Shhh, muy vulnerable.


En el frío de la noche se arropan mis dudas, se ensanchan y se revuelcan en una danza descarada y voluptuosa. Yo aprieto los dientes y aguanto las lágrimas, shhhh aguanto las lágrimas. No tengo de donde sujetarme, pero aguanto las lágrimas.


Talvéz en un cajón de mi ropa vieja se encuentre la ingenuidad pretérita que me llenaba el corazón de ilusiones ajenas, de las que me sentía heroína. Ahora entiendo con amargura que nadie quiere ser auxiliado.


He comprendido que debo alimentarme en vez de alimentar, pero creo que hace falta cubrirme con una crisálida para aceptarlo. Shhh debo aceptarlo.


¿Cuál será mi rostro al amanecer?

¿Serán algunas facciones adormecidas, que visitaran la urbe del ajetreo sin despegarse de las sábanas malditas?

¿Alguna vez despertaré yo, y no el modo automático de mi?


Es doloroso, es irritante...

Una de las pocas cosas que me despertó esta semana fue la clase de Sociología del Arte.

Sí, Yucef Merhi estaba ahí, y fue su sacudida mordaz lo que me hizo reaccionar y remover un poco la sangre en mis venas.


Mi aficción a este espacio es reducida, sin embargo pienso que la intención de todo esto es nutrir nuestro intelecto de manera eficiente y didáctica (la pegaron del techo Yucef y Gloria). Tendremos que leer de muchos temas actuales, no tan actuales, controversiales... De manera simultánea y en cadena. Vamos a manejar un universo de ideas que estimulará nuestro apetito por los conocimientos y que en el mejor de los casos los satisfaga.

El proyecto en sí debería llamarse Cultura General para estudiantes... ;)

La verdad no está mal. Probablemente caminamos sobre suposiciones y nuestro horizonte está plagado de tinieblas. Ansío que se consolide la idea de este proyecto para bien, lo ansío como un ejercicio de fe.


De todos los lugares para escribir, elegí éste. ¿Ya comenté que no soy particular entusiasta?, en fin, logró al menos distraerme de algunos conflictos.

Ya me acercaré acá con un tono más académico y probablemente esta entrada desaparecerá.

Por lo pronto me voy a los brazos de Morfeo.

Gin